¿Alguna vez te has dado cuenta de que en este tramo horario reina la tranquilidad? Todos están comiendo, volviendo del trabajo (los afortunados) y llegando a casa despues de 6 horas de clase.
El ambiente es distinto. Apenas hay ruido en la calle y el Sol parece calentar más que en otro momento del día. No tienes fuerzas para hacer nada, ya que todas se van en llevar a cabo la digestión. Sólo piensas en descansar, dormir o plantarte ante la pantalla del ordenador aunque sea simplemente para revisar el inicio de Tuenti una y otra vez a la espera de que alguien se haya acordado de ti.
Pero todo acaba cuando pasan las 4. Ya el ambiente de tranquilidad se pierde. El astro rey ya se ha desplazado más y no mantiene tanto la perpendicularidad. Después, todo se convierte en la transición entre el día y la noche.
Hace tiempo que aprendí a disfrutar de esta hora. No hago nada. Sólo vagueo y, como dije antes, me empotro en el ordenador sin nada en mente, dejando que la música fluya.
Aprovecha este tiempo; despéjate después de toda la mañana, y prepárate para aquello que tengas que hacer por la tarde. Date una vuelta por ahí ahora que la mayoría de la gente se encuentra en sus casas, fúmate un cigarrito (o cualquier otra cosa) bajo el Sol... Dedica ese tiempo a tu persona, que tampoco viene mal desconectar de todo y hacerte compañía a ti mismo.
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